El 2008 se constituyó en el año en que el panorama económico empezó a deteriorarse, luego de cuatro años consecutivos de crecimiento sostenido. En lo local, el desempleo volvió a crecer, el consumo de energía en la industria se redujo y la construcción tuvo un leve descenso; no obstante otros indicadores mostraron resultados muy positivos, la inflación en la ciudad fue la más baja del país, las exportaciones continuaron creciendo, el consumo de energía en el comercio aumentó, se crearon más y se liquidaron menos sociedades; adicionalmente la tasa de cambio terminó el año en niveles superiores a los $2.200 por dólar, favoreciendo el sector exportador del país. Descarga informe aquí